El espíritu llegado de los Andes bolivianos es para el equipo como la pócima para Asterix, sin él, no es lo mismo. Intenso en todas sus acciones nunca baja los brazos, y cuando digo nunca, es NUNCA.
Su carácter, su calidad y su procedencia le hacen un blanco perfecto para aficiones rivales y ahí, hemos conseguido el mayor trabajo de este año en lo personal. Randy se ha ganado el papel de capitán para el año 2009-2010 como premio a su cambio en las reacciones.
En lo deportivo, es un gran cierre en anticipación y colocación, no tanto en el uno contra uno, donde acostumbra a cometer faltas en exceso, en ataque, se comporta como un cierre que no se contenta con tocar y guardar, si no con tocar, crear y finalizar y ello le ha permitido darnos goles decisivos, pero también le ha llevado a obcecarse en su juego y perder el control del partido.
La anécdota: Nuestro jugador más duro... se convirtió en árbitro!
jueves, 25 de junio de 2009
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